Autoconciencia emocional: el emocionómetro

Entrada escrita por Begoña Morales López, profesora de educación infantil.

Resumen: dinámica emocional para infantil. Se sitúa en la competencia emocional de autoconocimiento. Aprender a identificar y poner nombre a las emociones.

emocionometro begoUna de las áreas de las Competencias Emocionales según la clasificación que utilizamos en ISIE es el Autoconocimiento y dentro de ella la primera competencia que se trabaja es la Autoconciencia Emocional

Nosotros como adultos tenemos una asignatura pendiente la autoconciencia emocional, ya que no tuvimos la suerte de que nos enseñaran a darnos cuenta de lo que estábamos sintiendo, a ponerle nombre, en definitiva a tener en cuenta nuestras emociones y escuchar lo que nos dicen.

La educación emocional desde la más temprana edad es una tarea importante que debemos realizar como padres y como maestros. Todas las emociones nos dan una información aunque sean emociones desagradables de sentir, pero, sí las escucho con atención podré sacar una información muy valiosa, que me ayudarán a crecer como persona y a desarrollar todo mi potencial, y ese precisamente es el objetivo de la educación.

Es por ello que desde hace algunos años trabajo en mi aula con mis niños de infantil las emociones. El primer paso que hay que dar es la autoconciencia emocional, esto es, darse cuenta de lo que estoy sintiendo, qué me ha hecho sentir así, y qué información me está dando esa emoción.

El Emocionómetro

emocionometroObjetivos

  • Identificar emociones
  • Identificar la intensidad de la emoción

El emocionómetro es una escala de 7 columnas cada una de un color y con el nombre de cada una de las emociones básicas más la vergüenza. Cada emoción gradúa también la intensidad  de la emoción (más arriba más intensa). Cada niño una vez identificada la emoción que siente, sitúa un cartelito en el lugar adecuado del emocionómetro.

El modo de trabajo que yo sigo es: por las mañanas en la asamblea decimos cómo nos sentimos siguiendo estos pequeños pasos:

  1. ¿Qué sientes?
  2. ¿Dónde lo sientes en tu cuerpo?
  3. ¿Qué ha sucedido para que te sientas así?
  4. ¿Qué te pide tu emoción, qué necesitas?
  5. ¿Puedes hacerlo tú solo o necesitas ayuda?

Vamos colocando nuestro nombre en el Emocionómetro según nos sentimos en el momento de la asamblea. A lo largo del día puedo ir al emocionómetro y cambiar mi nombre según haya cambiado mi emoción.

emocionametro escalaCon los más mayores, los de 5 años, aumentamos también el vocabulario, ya que además nos fijamos en el grado de la emoción que sentimos. Hacía arriba más alegre (feliz, ilusionado, entusiasmado) y hacia abajo menos alegre (contento, tranquilo, a gusto) Las palabras para designar la intensidad de cada emoción han sido consensuadas por todos en la asamblea, y luego la maestra ha elaborado el emocionómetro.

Es maravilloso  ver cómo poco a poco aprenden a expresar lo que sienten, a nombrarlo y a saber calibrar la intensidad que tiene. Desde aquí es fácil pasar a qué les informa la emoción y después a qué necesitan.

Un comentario en “Autoconciencia emocional: el emocionómetro

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